miércoles, 2 de septiembre de 2009
¡Se acabó la sequía!
Tras un mes de abstinencia, ayer volvió a abrir el Templo de las Bravas, y podemos atestiguar que sus patatas siguen tan fantásticas como siempre. No estaba el mítico Quique, pero no faltaron ni Toni, José Luis, Perico, Jordi y el resto de la eficaz tripulación del Portaaviones de las dobles mixtas. Os recordamos que la mejor manera de disfrutar de esta mítica tapa es leyendo nuestro libro. Dicho queda.
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La sequía hay que regarla con cerveza y bravas. Bernat de L'Hospitalet.
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